Enfrentarse a los problemas de acné puede ser una lucha real. Tutelar nuestro rostro de las espinillas y el acné puede requerir, a veces, un esfuerzo sobrehumano. Pero no hay necesidad de preocuparse porque existe una solución para cada problema y el acné no es una excepción.
¿Qué es el acné?
El acné es una afección común de la piel que genera espinillas, granos y quistes inflamados. Suele aparecer en la cara, la espalda y el pecho y es más común en adolescentes, pero también puede afectar a los adultos.
¿Por qué tengo acné?
El acné ocurre cuando las glándulas sebáceas de la piel producen demasiado sebo. Este sebo se mezcla con las células muertas de la piel y ambos pueden tapar los poros de la piel. Las bacterias que viven en la piel pueden infectar estos poros bloqueados, lo que provoca granos y espinillas.
¿Cómo puedo cuidar mi piel propensa al acné?
1. Limpieza de la piel
En la lucha contra el acné, la limpieza de la piel es esencial. Lo ideal es lavarse la cara dos veces al día con un limpiador suave formulado especialmente para el acné, que no reseque excesivamente la piel ni cause irritación. Sin embargo, si siente que su piel está limpia durante el día, no hay necesidad de hacerlo más de dos veces.
2. Usa los productos adecuados
Existen productos específicamente diseñados para el cuidado de la piel propensa al acné. Asegúrate de usar productos no comedogénicos y sin aceites, ya que estos no taponarán tus poros. Busca productos que contengan ingredientes activos que combatan el acné, como el ácido salicílico o el peróxido de benzoílo.
3. Hidratación
Aplicar un hidratante ligero es esencial para mantener la piel con acné hidratada y saludable. Evita los productos pesados que pueden bloquear los poros y causar brotes. Los humectantes con gel son generalmente los mejores para la piel propensa al acné ya que son más livianos que las cremas y lociones.
4. Protección solar
Es muy importante proteger tu piel del sol si tienes acné. El sol puede incrementar la inflamación y enrojecimiento, y puede manchar la piel donde has tenido granos. Usa siempre un protector solar de al menos 30+ cuando estés fuera.
5. No aprietes tus granos
Probablemente hayas escuchado esto antes, pero es importantísimo evitar lo más posible tocar tu rostro y apretar tus granos. Esto no sólo empeora el acné, sino que puede conducir a cicatrices permanentes. Si tienes un grano que realmente necesitas tratar, es mejor acudir a un dermatólogo que tratar de lidiar con ello yourself.
Productos recomendados para el cuidado de la piel propensa al acné
1. Limpiador facial suave
Un buen limpiador facial de acné no debería secar ni irritar tu piel. Debería eliminar con eficacia el exceso de sebo, las células muertas de la piel y cualquier cosmético, dejando la piel fresca y lista para los siguientes pasos de tu rutina de cuidado de la piel. También podría contener ingredientes que ayudan a combatir el acné como el ácido salicílico o el peróxido de benzoílo.
2. Tónico facial sin alcohol
Un buen tónico facial puede ayudar a combatir la proliferación de bacterias en la piel y a equilibrar el pH de tu piel tras la limpieza con un limpiador facial. Asegúrate de elegir un tónico sin alcohol para evitar la irritación.
3. Tratamiento localizado
Si eres propenso a brotes de acné o espinillas, un tratamiento localizado puede ser muy útil. Estos tratamientos suelen contener ingredientes que matan las bacterias de la piel y ayudan a reducir la inflamación y el enrojecimiento.
4. Hidratante sin aceites
Un buen hidratante para la piel propensa al acné debería ser ligero y sin aceites, y debe hidratar tu piel sin bloquear tus poros. Igualmente suelen contener ingredientes que ayudan a combatir el acné y la inflamación de la piel.
5. Protector solar facial
Elige un protector solar especial para cara y de al menos 30+. Debe ser no comedogénico y sin aceites para evitar obstruir tus poros, y debería ser muy ligero y absorberse rápidamente sin dejar la piel pegajosa.
A tener en cuenta
Recuerda siempre que aunque desesperes con tu acné, es posible controlarlo con el cuidado y el tratamiento adecuados. Habla siempre con un dermatólogo si tienes dudas sobre cualquier producto o sobre cómo cuidar tu piel propensa al acné. Recuerda: cada piel es única y lo que funciona para una persona podría no funcionar para otra.