Los capilares rotos afectan cada vez a más personas. La piel con cuperosis es una de las más complicadas a la hora de establecer un cuidado diario de la piel. Sigue leyendo para aprender a cuidarla para que su hipersensibilidad no sea especialmente molesta.
¿Conoces cómo cuidar la piel con cuperosis correctamente? Si no es así, sigue leyendo. El artículo te aclarará todas las dudas.
Características de la piel con capilares dilatados
¿Cómo saber si tienes una piel con cuperosis? Esto se puede saber por el característico enrojecimiento de la piel que aparece en el rostro. No es un rubor normal. Observado desde cerca se pueden apreciar los capilares que se encuentran bajo la piel.
Los vasos sanguíneos son muy finos y frágiles en este tipo de piel. Se rompen con facilidad, causando telangiectasias, o capilares rotos llamados arañas vasculares por su forma. Las telangiectasias son más propensas a aparecer en las mejillas, la frente, la nariz y la barbilla.
Además, la piel con cuperosis es sencillamente más delicada, supersensible y más propensa a las irritaciones. Suele causar sensación de malestar, ardor y picor. Para evitarlo, hay que darle un cuidado óptimo.
¿Qué hay que evitar si se tiene una piel con cuperosis?
Primero de todo es importante hacer una lista con cosas que están totalmente prohibidas porque intensifican los síntomas característicos de la piel con cuperosis: enrojecimiento, irritación, arañas vasculares. Los factores más potentes son:
- alimentos picantes, por ejemplo, con alto contenido de pimienta negra o chile
- temperatura demasiado alta, por ejemplo, en la sauna o en un baño caliente
- temperatura demasiado baja, por ejemplo, en invierno
- productos de cuidado de la piel inadecuados, por ejemplo, que contengan retinol o ácidos
- consumo excesivo de alcohol, cigarrillos, etc.
- exceso de actividad y de ejercicio físico
- agua dura y con cloro, por ejemplo, en la piscina
Los desequilibrios hormonales -por ejemplo, los producidos durante el embarazo o la menopausia- también pueden intensificar la condición de la piel y empeorar la piel con cuperosis. Es imprescindible hacer revisiones periódicas y consultar al médico.
Cuidado de la piel con cuperosis
¿Cómo se cuida la piel con cuperosis? La verdad es que este tipo de pieles necesitan de una serie de cuidados basados en muchas reglas de lo que hay que hacer y lo que no. Por supuesto, hay que evitar todo lo mencionado anteriormente. Por ejemplo, para lavarse la cara, usa solo agua fresca y suave, y limpiadores sin alcoholes, parabenos ni agentes de lavado fuertes como SLS/SLES.
Como es lógico, no hay que olvidar el ABC del cuidado del rostro, que es hidratar, nutrir y proteger el cutis frente a la luz solar, por ejemplo. Al mismo tiempo, debes añadir productos para el cuidado de la piel que contengan ingredientes que refuercen los vasos sanguíneos, como la vitamina C, el árnica o el ginkgo. Estas sustancias fortalecen las paredes de los vasos sanguíneos y evitan que se rompan.
Otra cosa que hay que recordar es que las pieles con cuperosis necesitan de muchos cuidados con productos naturales en casa. Si quieres aliviar tu piel con cuperosis, opta por aceites naturales, mascarillas caseras y productos totalmente naturales. Cuanto más sencillos sean los ingredientes, mejores serán los efectos sobre la piel sensible con capilares rotos.
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